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Rotor:
- Los rotores se utilizan típicamente para áreas más grandes como céspedes, campos deportivos o campos agrícolas.
- Operan haciendo girar chorros de agua en un patrón circular o semicircular.
- Los rotores generalmente tienen un alcance más largo y pueden cubrir áreas más grandes en comparación con los cabezales de rociado.
- Están diseñados para distribuir el agua de manera más uniforme sobre un radio más grande, lo que los hace adecuados para áreas con un mayor espaciado entre puntos de riego.
- Los rotores a menudo tienen patrones de arco ajustables y configuraciones de radio para personalizar el área de cobertura.
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Cabezal de rociado:
- Los cabezales de rociado se utilizan para áreas más pequeñas o áreas que requieren un riego más preciso, como parterres de flores, arbustos o franjas estrechas de césped.
- Operan rociando agua en un patrón fijo, típicamente en forma de abanico o circular.
- Los cabezales de rociado tienen un alcance más corto en comparación con los rotores y son ideales para áreas con un espaciado más cercano entre puntos de riego.
- Proporcionan un riego más localizado y dirigido, lo que los hace adecuados para áreas donde se necesita aplicar agua de manera más precisa.
- Los cabezales de rociado vienen en varios tipos, incluidos cabezales de rociado fijos, cabezales de rociado ajustables y cabezales de rociado emergentes (que se retraen al suelo cuando no están en uso).
En resumen, aunque tanto los rotores como los cabezales de rociado se utilizan para regar paisajes, los rotores son más adecuados para áreas más grandes con un espaciado más amplio entre puntos de riego, proporcionando una cobertura uniforme sobre un radio más grande, mientras que los cabezales de rociado son más apropiados para necesidades de riego más pequeñas y precisas en áreas con un espaciado más cercano entre puntos de riego.